El Tribunal de Disciplina de la ANFP ha tomado una decisión drástica en el caso de Patricio Rubio. El delantero de Ñublense deberá cumplir una suspensión de cuatro partidos en la próxima edición de la Copa Chile, como castigo por su comportamiento en la final ante Universidad de Chile.
Durante el encuentro, Rubio se mostró visiblemente molesto por la anulación de un gol y las decisiones arbitrales. En un momento de calentura, el jugador insultó gravemente al árbitro José Cabero, quien en su informe detalló los términos utilizados por el delantero y los gestos obscenos que realizó.
"Emplear lenguaje ofensivo, grosero u obsceno y/o gestos de la misma naturaleza; Una vez amonestado, me grita a viva voz 'soy cagón malo concha de tu madre' y al mismo tiempo me hace gestos obsceno, tocándose los genitales", detalló Cabero en su informe. Además, el árbitro agregó que Rubio se dirigió a las cámaras de televisión para acusar a los árbitros de amaño.
Esta sanción llega en un momento crucial para Rubio, quien se encuentra en la búsqueda de un nuevo equipo tras finalizar su contrato con Ñublense. Sin duda, esta suspensión podría afectar sus opciones de encontrar un nuevo club.
La expulsión de Rubio y la posterior sanción son un claro ejemplo de que las acciones dentro y fuera de la cancha tienen consecuencias. El fútbol chileno ha enviado un mensaje claro: no se tolerarán este tipo de comportamientos.
22/12/2024
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