Por Mateo Garzón
Santiago Tapia, portero de 16 años, viajó con el equipo mayor de Colo Colo para realizar la pretemporada en La Serena. El guardameta es uno de los mejores prospectos del club y genera ilusión con que sea el futuro Claudio Bravo. Jorge Almirón lo llevó y podrá verlo de cerca para definir si en el futuro le da alguna oportunidad.
En medio de la vorágine del mercado de fichajes y la conformación del plantel para la temporada 2025, una noticia ha generado una particular ilusión en Colo Colo: la presencia de Santiago Tapia, un joven portero de tan solo 16 años, en la pretemporada que el equipo realiza en La Serena. El técnico Jorge Almirón decidió llevarlo para observarlo de cerca, y las expectativas son altas: algunos ya lo ven como el sucesor de Claudio Bravo.
Santiago Tapia ha destacado en las divisiones inferiores de Colo Colo por sus notables condiciones bajo los tres palos. Su altura, agilidad, reflejos y seguridad lo han convertido en una de las grandes promesas de la cantera alba.
Si bien su corta edad podría sugerir que aún le falta rodaje, Almirón ha visto en él un potencial enorme que no quiere desaprovechar. Por eso, decidió incluirlo en la pretemporada en La Serena, dándole la oportunidad de entrenar con el primer equipo y aprender de los jugadores más experimentados.
La decisión de Jorge Almirón de llevar a Santiago Tapia a la pretemporada es un claro mensaje de confianza en el joven portero. El técnico argentino ha demostrado tener buen ojo para descubrir talentos y no duda en darles oportunidades a los jóvenes que demuestran tener condiciones.
Para Tapia, esta es una oportunidad única de mostrar su valía y de adquirir experiencia en un ambiente profesional. Entrenar junto a jugadores de la talla de Brayan Cortés (en caso de que continúe), le permitirá acelerar su desarrollo y aprender los secretos del puesto.
La irrupción de Santiago Tapia en Colo Colo ha traído a la memoria el recuerdo de otro gran portero formado en la cantera alba: Claudio Bravo. La comparación, aunque prematura, es inevitable. Ambos comparten características similares: buena estatura, reflejos felinos y una gran personalidad bajo los tres palos.
Si bien Tapia aún tiene un largo camino por recorrer, la ilusión de que pueda seguir los pasos de Bravo está presente en el club y en la hinchada. La idea de tener un portero formado en casa que defienda el arco albo durante muchos años es un sueño que se alimenta con la presencia de Tapia en la pretemporada.
Si bien las expectativas son altas con Santiago Tapia, es importante mantener la calma y entender que se trata de un jugador en formación. A sus 16 años, aún le falta madurar física y futbolísticamente.
Lo fundamental ahora es llevarlo de la mejor manera, brindándole las herramientas necesarias para su desarrollo y evitando presionarlo con comparaciones que podrían ser contraproducentes. El trabajo que se realice con él en las divisiones inferiores y las oportunidades que le brinde Almirón en el primer equipo serán claves para su futuro.
La presencia de Santiago Tapia en la pretemporada abre un interesante debate sobre el futuro del arco de Colo Colo. Con la posible continuidad de Brayan Cortés, Tapia tendrá la oportunidad de aprender y crecer a su lado.
En un futuro no muy lejano, Tapia podría convertirse en el sucesor natural de Cortés, consolidándose como el portero titular del Cacique. Sin embargo, este es un proceso que requiere tiempo y paciencia.
La decisión de Jorge Almirón de llevar a Santiago Tapia a la pretemporada es un mensaje claro de su apuesta por la cantera de Colo Colo. El técnico argentino valora el trabajo que se realiza en las divisiones inferiores y está dispuesto a darles oportunidades a los jóvenes talentos.
Esta política de Almirón es una buena noticia para el club y para el fútbol chileno, ya que fomenta el desarrollo de nuevos jugadores y asegura el futuro del deporte.
Santiago Tapia, con tan solo 16 años, ha comenzado a ilusionar a Colo Colo. Su presencia en la pretemporada en La Serena, de la mano de Jorge Almirón, es una muestra del gran potencial que tiene este joven portero. Si bien las comparaciones con Claudio Bravo son inevitables, es importante llevarlo con calma y brindarle las herramientas necesarias para su desarrollo. El futuro del arco albo podría estar en sus manos, pero el camino aún es largo. Lo importante es que Colo Colo ha encontrado un nuevo diamante en bruto al que pulir.
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