Por Víctor Martínez
La generación dorada será recordada por siempre en la historia de nuestro fútbol. Todo lo que consiguieron, los dos títulos inéditos de Copa América, el posicionamiento internacional que alcanzó la selección chilena jugando de igual a igual contra los mejores equipos del mundo, el juego que alcanzó la Roja en el Mundial 2014, son recuerdos que están escritos con letras gigantes en los libros de historia.
Uno de sus protagonistas fue, sin duda, Gary Medel. Notable jugador que comenzó su carrera como volante de corte y fue formado en las divisiones menores de Universidad Católica. Fue titular y figura de la selección sub 20 que alcanzó el tercer lugar en el Mundial Canadá 2007 de la categoría. Estamos hablando de un crack.
Con una estupenda carrera, emigró al extranjero a Boca Juniors y luego cruzó el Atlántico para llegar al Sevilla de Andalucía. Ahí estuvo tres temporada y partió al Cardiff, que competía en la liga inglesa. Luego el Inter de Milan fue su casa por tres temporadas para pasar al Besiktas de Turquía. Hasta que en 2019 fichó en el Bologna, regresando a la Serie A de Italia.
No obstante esta brillante carrera, las lesiones han comenzado a mermar la carrera del jugador de 35 años. Desde febrero no volvió a jugar como titular en el Bologna y ayer en el empate 1-1 contra la Juventus entró sobre el final del partido. Su equipo está lejos de puestos de competencias europeas, y su presente le hace reflexionar sobre qué hacer en la próxima temporada.
Según la prensa italiana, son cuatro los clubes de Qatar que estarían tras los pasos del exjugador de Universidad Católica. En la precordillera están evaluando la situación y probablemente le hagan llegar una oferta en el mercado de pases que abre al final de la primera rueda. Quizás el regreso del hijo pródigo está más cerca de que se espera.
23/12/2024
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