Por Santiago Rojas
Gustavo Quinteros no es de esos entrenadores que se guarden las críticas para la interna y solo salgan a hablar de cosas positivas, es más, se podría pensar todo lo contrario del adiestrador boliviano-argentino, que ya ha tenido bastantes roces con los futbolistas por exponerlos públicamente, además de la interna.
En estos primeros meses de la temporada 2023, Colo Colo ha deambulado por una irregularidad que ha mantenido muy preocupados a los hinchas, que esperaban que el año comenzara con triunfos, tal como acabó el 2022, no obstante, ha sido todo lo contrario, partiendo por la derrota en la Supercopa ante Magallanes.
Luego de no poder vencer de local a Everton y Ñublense, sumado a la goleada que sufrieron ante O’Higgins en Rancagua, el entrenador culpó a la lenta adaptación de los refuerzos como razón para entender por qué el equipo no estaba andando de la manera esperada. Dijo que haría cambios, y esos ya se están notando.
Así como Damián Pizarro, Leonardo Gil y los 3 centrales extranjeros se han ganado su lugar en el equipo, otros ya definitivamente lo estarían perdiendo al punto de tener que buscar probablemente una salida a mitad de año. Ese sería el caso de Matías Moya o Marco Rojas, ambos jugadores con pasaporte nacional, pero que de igual modo buscarían ser liberados para dejar un cupo para refuerzo.
Matías Moya, talentoso volante creativo que llamara la atención en Ñublense, podría dejar el club a mitad de año y ser moneda de cambio con Talleres de Córdoba para el fichaje de Matías Catalán, lateral derecho nacional que interesaría a los albos, que desde la partida de Óscar Opazo, no han logrado hallar un especialista que convenza.
23/12/2024
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