Por Santiago Rojas
En el vertiginoso mundo del fútbol, las historias de ascenso y descenso de valor de los jugadores escriben capítulos llenos de drama y expectativa. Un claro ejemplo de este fenómeno es el contraste entre Kendry Páez, la perla ecuatoriana que ha capturado la atención del fútbol europeo, y Alexis Sánchez, cuyo valor de mercado se desinfla, aunque su carrera se resiste a morir.
Mientras Kendry, con solo 16 años, se prepara para un futuro brillante en el Chelsea, Sánchez experimenta lo que muchos ven como la penumbra de su carrera deportiva.
El ecuatoriano ha experimentado un meteórico ascenso que ha desafiado toda expectativa. Desde su debut en la selección Sub-20 hasta su participación con la selección mayor de Ecuador, el joven ha demostrado una capacidad y madurez en el campo que trasciende su edad. Su impacto en Independiente del Valle ha sido tal, que en 2023 jugó 32 partidos, destacándose tanto en la Copa Libertadores Sub-20 como en la de mayores, y ahora ve su valor de mercado situarse en los 10 millones de euros.
Este joven prodigio ha conseguido situarse como el quinto jugador ecuatoriano más valioso, un logro no menor si se considera la calidad de jugadores como Moisés Caicedo y Pervis Estupiñán que lideran esta lista.
En el otro extremo de esta narrativa se encuentra Alexis Sánchez, cuya carrera ha sido sinónimo de éxito y reconocimiento internacional. No obstante, el tiempo y las circunstancias han llevado a que su valor en el mercado se sitúe en 2,5 millones de dólares, el más bajo en toda su trayectoria. A sus 35 años, Sánchez sigue compitiendo en la Serie A con el Inter, demostrando su calidad y experiencia en el campo, pero enfrentando el inevitable declive que el paso del tiempo impone a todos los deportistas.
22/12/2024
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