Por Santiago Rojas
El interés de Colo Colo por incorporar a Paolo Guerrero generó una gran expectativa entre los fanáticos del fútbol chileno. Sin embargo, las negociaciones no fructificaron, y los detalles revelados recientemente sobre las exigencias del delantero peruano para firmar con César Vallejo ayudan a entender por qué su llegada al club albo no se concretó.
La incorporación de Paolo Guerrero a la Universidad César Vallejo no solo ha generado expectativas deportivas, sino que también ha revelado el nivel de compromiso del club para garantizar su seguridad y bienestar, en medio de la preocupante situación de seguridad en Trujillo.
El club ha dispuesto medidas excepcionales, como proporcionarle al 'Depredador' un carro blindado para todos sus traslados, equipado con protección antibalas y un conductor particular.
Además, el arreglo incluye un avión privado al estilo de celebridades internacionales, permitiendo a Guerrero movilizarse no solo hacia Trujillo sino también para visitas familiares o cualquier otro compromiso personal, reafirmando el alto nivel de las exigencias atendidas por la UCV.
A esto se suma un salario estimado en 120.000 dólares mensuales, posicionándolo como el futbolista mejor remunerado de la liga peruana y reflejando el esfuerzo económico significativo del club por asegurar su fichaje. Estas condiciones, excepcionales en el contexto del fútbol peruano, evidencian la importancia de Guerrero para el proyecto deportivo de la Universidad César Vallejo y el esfuerzo por brindarle un entorno seguro y confortable.
Tal escenario plantea preguntas sobre las negociaciones de Guerrero con Colo Colo y si las exigencias presentadas fueron un factor decisivo para que el club chileno decidiera no avanzar en su fichaje.
22/11/2024
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