Por Santiago Rojas
Es indudable que la llegada de Mauricio Pellegrino a Universidad de Chile significó un salto de calidad para el equipo, tanto en su nivel futbolístico como en su estatibilidad moral y emocional. Ahora el equipo parece ser otro, mucho más fuerte y más unido, que no se cae a la primera situación difícil dentro del partido.
En esta evolución mucho han tenido que ver la columna vertebral que logró armar el entrenador, Mauricio Pellegrino, quien señaló que su intención era armar duplas que funcionaran bien. Matías Zaldivia y Luis Casanova han formado una pareja de centrales que lidera al equipo desde el fondo, relegando incluso a Nery Domínguez.
Ahora la intención del director técnico argentino sería extrapolar este tándem al sector medio, donde, a su parecer, Federico Mateos y Emmanuel Ojeda hasta ahora no han logrado consolidarse como una dupla que organice y domine los tiempos del equipo, como podrían hacerlo para dar un verdadero salto de calidad.
En algún momento probó con Luis Felipe Gallegos como segundo volante central, pero no funcionó. No lo utilizó en todo el primer semestre y ahora en la intertemporada habría vuelto a perder un lugar, así que sería llamado a abandonar el equipo pensando en el segundo semestre. Es uno de los sueldos más altos, por eso costaría encontrarle nuevo club.
Luis Felipe Gallegos definitivamente no sería tomado más en cuenta por Mauricio Pellegrino y el club ya le estaría buscando una opción de salida, sin embargo, debido a que tiene un salario muy alto para el medio nacional, estaría costando encontrarle un equipo que cumpla con sus exigencias en el fútbol chileno. Una salida a México estaría también muy difícil.
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