El futbolista chileno Eduardo Vargas se encuentra a un solo partido de alcanzar un hito histórico en el fútbol nacional, tras lograr la clasificación a la final de la Copa Libertadores con el Atlético Mineiro. La victoria del Galo sobre River Plate en las semifinales le ha abierto la puerta a Vargas para levantar por primera vez la "Gloria Eterna", un trofeo que ha eludido a muchos chilenos a lo largo de los años.
El 30 de noviembre, Vargas y su equipo se enfrentarán a Botafogo en un duelo crucial que se disputará en Argentina. De conseguir la victoria, Vargas se convertiría en el primer jugador chileno en la historia en ganar tanto la Copa Libertadores como la Copa Sudamericana, un logro sin precedentes que lo posicionaría entre los grandes íconos del fútbol chileno.
Eduardo Vargas ha tenido una carrera marcada por momentos memorables, incluyendo uno que dejó a muchos sorprendidos en 2016. Durante su etapa en el TSG 1899 Hoffenheim, el delantero fue visto conduciendo un Ferrari 458 Italia, un superdeportivo que ya había estado en el centro de atención por su conexión con Arturo Vidal, quien sufrió un accidente en este mismo modelo tras la Copa América 2015. Este impresionante vehículo, con un valor de mercado de aproximadamente $150 millones, resalta el estatus de Vargas tanto dentro como fuera del campo.
El Ferrari 458 Italia, un Cavallino diseñado por Pininfarina y producido por la famosa fábrica de Maranello, se lanzó al mercado en 2010. Este superdeportivo italiano está equipado con un potente motor V8 de 4.5 litros que produce 570 caballos de fuerza y 540 Nm de par máximo. Entre sus impresionantes características, se destaca su capacidad de acelerar de 0 a 100 km/h en solo 3.4 segundos, alcanzando una velocidad máxima asombrosa de 325 km/h.
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