Por Mateo Garzón
La U de Chile, para enfrentarse a Coquimbo Unido por el Torneo de Verano, saltaría con: Gabriel Castellón, Fabián Hormazábal, Franco Calderón, Matías Zaldivia, Maximiliano Guerrero, Israel Poblete, Marcelo Díaz, Lucas Assadi, Matías Sepúlveda, Nicolás Guerra y Leandro Fernández. Ningún refuerzo en la lista y lo mismo que se vio la temporada pasada donde no lograron sostener el primer lugar.
Universidad de Chile se prepara para enfrentar a Coquimbo Unido en el Torneo de Verano, un certamen que servirá como termómetro para medir el estado del equipo de cara a la exigente temporada 2025. Sin embargo, la oncena que saltaría a la cancha ante los “piratas” ha generado cierta inquietud entre los hinchas azules.
La decisión del cuerpo técnico de presentar un equipo sin refuerzos para este encuentro amistoso plantea varias interrogantes. Si bien la continuidad de un plantel puede ser un factor positivo para la cohesión y el entendimiento entre los jugadores, la falta de nuevas incorporaciones también puede generar dudas sobre la capacidad del equipo para dar un salto de calidad y pelear por objetivos mayores en la próxima temporada.
Recordemos que la temporada 2024 dejó un sabor agridulce en la hinchada azul. Si bien se logró el título de Copa Chile y un meritorio subcampeonato en el torneo local, el equipo no logró mantener la regularidad necesaria para consolidarse en el primer lugar y pelear palmo a palmo por el campeonato hasta el final. La falta de variantes y la dependencia de algunos jugadores clave fueron factores que influyeron en este desenlace.
La ausencia de refuerzos en la oncena titular ante Coquimbo Unido podría interpretarse de dos maneras. Por un lado, podría indicar que el club no ha logrado concretar las incorporaciones deseadas en este mercado de pases. Esto generaría preocupación entre los hinchas, que esperan ver caras nuevas que le den un nuevo aire al equipo.
Por otro lado, esta decisión también podría ser una apuesta del cuerpo técnico por consolidar la base del plantel que terminó la temporada anterior. Se podría estar buscando afianzar el funcionamiento colectivo y darles rodaje a los jugadores que ya conocen el sistema de juego. Sin embargo, esta estrategia conlleva el riesgo de que el equipo se estanque y no logre evolucionar lo suficiente para afrontar los desafíos del 2025, especialmente considerando la participación en la Copa Libertadores.
La repetición de la base del 2024 plantea la interrogante de si el equipo ha logrado solucionar los problemas que lo aquejaron durante la temporada pasada. La falta de contundencia en ataque en algunos partidos, la irregularidad en el juego y la dependencia de individualidades fueron aspectos que el equipo deberá mejorar si quiere aspirar a grandes cosas.
Si bien jugadores como Marcelo Díaz y Lucas Assadi son fundamentales en el funcionamiento del equipo, la falta de alternativas en el mediocampo y en la delantera podría ser un problema a largo plazo. La llegada de refuerzos que aporten variantes tácticas y eleven el nivel de la competencia interna se antoja fundamental para que la “U” pueda dar el salto de calidad que se espera.
El partido ante Coquimbo Unido y los demás encuentros del Torneo de Verano serán una prueba de fuego para este equipo. Servirán para evaluar el estado físico de los jugadores, probar nuevas variantes tácticas y, sobre todo, para analizar si la base del 2024 es suficiente para afrontar los desafíos que se avecinan.
Los hinchas de la “U” esperan ver un equipo con una propuesta de juego clara, con mayor contundencia en ataque y con una solidez defensiva que le permita competir de igual a igual con cualquier rival. La falta de refuerzos en este primer partido genera cierta incertidumbre, pero también abre la posibilidad de que los jugadores que ya están en el plantel demuestren que pueden dar un paso adelante y asumir el protagonismo que se les exige.
En definitiva, el partido ante Coquimbo Unido marcará el inicio de un nuevo ciclo para la “U”. La ausencia de refuerzos en la oncena titular plantea interrogantes sobre el futuro del equipo, pero también representa una oportunidad para que los jugadores demuestren su valía y convenzan al cuerpo técnico de que están listos para afrontar los desafíos del 2025. El tiempo dirá si la apuesta por la continuidad será la correcta o si la falta de nuevas incorporaciones terminará pasando la cuenta.
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